Fue un buen domingo para el Corinthians y malo para el fútbol.
Años después de que nos dejaran ver un filito del Mundial del 82, en mi cuadra los dos o tres aberrados y diletantes del balón hacíamos tertulia recordando a aquel Brasil que Rossi hundió en el segundo tiempo.
Claro, Falcao dejando pasar el balón para que Eder asesinara a Rinat Dasaev, que sí era un porterazo, no como el pobre Valdir. Esa jugada ( 1':18", aquí) no podía dejarse pasar y había que dramatizarla en reconstrucciones de los hechos en vallitas sobre asfalto.
El doctor, haciendo lo suyo.
Elegancia express la de este Sócrates.
Pero se fue.
Descanse en paz, doctor.
Si quieren llorar de alegría y logran pasar la mermelada inicial, cliqueen aquí, a partir del 1':35"