Qué viernes más hermoso el de ayer. Bello. Un montaje bajo el sol asesino, en el American Airlines Arena para amenizar la entrada a un concierto de Daddy Yankee nada menos. ¿Y creen que fue poca gente? Inocentes que son. Fue un carajal y medio. Y no sé qué me cae peor, si el reggaeton o los fans del reggaeton.
Que conste que se me puede salir el intolerante. A lo mejor estamos más viejos de lo que pensábamos, sobre todo cada vez que la Lis y yo nos insultamos a destiempo porque no nos gusta la gasolina.
El desmontaje fue peor, porque no pudimos tener acceso a la tarima (donde hubo un karaoke con canciones de adivinen quién) hasta que el público no abandonó el AAA, lo cual no ayudó para nada mi flácida admiración por perreantes y perreantas. Madrugada que tú conoces en eso.
Y el sábado, trabajito en uno de los pocos warehouses con vocación de sauna involutaria en el NW.
No sigo, porque va a parecer que me estoy quejando.
Una nota triste. Hace unos cuantos posteos atrás un amigo del cayo me había regalado un texto suyo contando una anécdota simpatiquísima. Laz, un caricaturista con un perenne pie en la NBA me contaba que Betán, el autor del texto, estaba enfermo. Hace dos días por vía del mismo Laz me entero que falleció, y me puse triste porque el Bétan era lo que se puede llamar con soltura, un tipo más que decente. Se ponía como un niño chiquito si tenía que hablar de pelota, de música o de literatura. Fotógrafo, dibujante, escritor, músico... a nada le tenía miedo. Y siempre un señor.
A lo mejor esto se presta para un encartonado recuento, pero el Bétan era demasiado vacilón para eso. Era un lord guapachoso, un gentleman del Caribe. Así que voy a saltarme la melaza postmortem y la metatranca laudatoria.
Partió el Bétan, probablemente no cuando él quería. Ojalá escriba sobre Miriam y nos haga fotos desde allá arriba. Y le escriba guiones al Pime, otro dibujero que permutó también hace un tiempo.
Lloremos con guaracha, que dura mais.
El autor de la foto de abajo es un fotógrafo ruso con el seudónimo de Max Sauco, surrealista manipulador de imágenes con un universo peculiar y unas composiciones intensas. Que tiene domino del Photoshop, se nota, y yo soy de los que no se molesta con el cacharreo gráfico. Si muchos fotógrafos pudieran pintar, dejarían la fotografía. Y hay pintores que darían un huevo por hacer de sus cuadros, fotografías.
Sauco sabe lo que hace.
Y por último, la actividad cultural.
Los asistentes a reuniones anteriores habrán notado que cada domingo les clavo una historieta en colores y en HD. Bueno, son las mismas que deberán salir a partir del próximo domingo 23 de septiembre en alguna parte del sitio web del Miami Herald. In English, no el Nuevo Herald. Nada en contra del Nuevo Heraldo, pero el que organizó el concurso para conseguir un colaborador dominical fue el Miami Herald, no su primo en castellano.
Los cuatro finalistas seremos posteados online, en plan picota pública, para que el respetable decida a punta de cliqueos quién es el ganador, o ganadora, porque no conozco a los otros tres competidores.
Cuando salga, me enteraré. Un poco tarde, sospecho, porque debo estar por esa fecha en Chicago, por cosas del curralo.
Espero no tener ausencias al post.
Y ahora para ustedes...
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4 comentarios:
Saludos, Mister Garrix, creo que una de esas neuronas cabronas es la que se me escapó por una tubería... Estoy en blanco...si la ve, me la empuja p'aca porfis...
Contra, se nos escapó el Beto. Otro que no le ve el fin a la historia...
Garrix, dispara bien eso del concurso. ¿Tenemos que caerle a clickeos a tu pincha? Avisa cuando se rompa el corojo!
Yo estoy medio metatrancoso también Garrix, el paso de una amiga por los madriles me ha dejado más desolado que la hurricane season y un poco reflexionado sobre tu posteo de hoy, me doy cuenta que todo está relacionado. Cuando uno empieza a tener aversión por el regaetón viene siendo la época en que también comienzan a morirse los amigos y otros seres queridos, posiblemente la vida, esa cosa que hasta ahora había sido algo natural e insignificante, se nos va haciendo cada día un lujo inapreciable. Quizás las nuevas generaciones no sepan de quien hablamos, cuando en elcayo se ha perdido todo, pero yo crecí leyendo los trabajos de Betán, es parte ya de la genética de mi cuerpo y cuando sea un viejo cagalitroso que no se acuerde de cuando meó la última vez, seguro me acordaré de sus dibujos.
Mi General,
si le veo una neurona suelta la meto en un pomo y se la guardo en el frío, pa que sepa de dónde se fue. Un abrazo sin freón.
Caminador,
así es. Alguien dijo una vez en una entrevista, que vino a asumir su vieja vejestoridad solo cuando perdió la cuenta de amigos muertos, y cuando dejó de desear a sus vecinas, para empezar a desear a sus hijas.
Betán quedará entre los más jóvenes, aunque nos desinflemos.
Del concurso, qué decir, no tengo ni idea de cómo será. Ya nos enteraremos cuando lo vea en la página del Herald y avisaré a todos para hacer fraude en las elecciones.
Nah, igual me va a saber a boniato jojoto si gano con fraude.
Just joking.
Libo,
tengo fe en que quede algo de resistencia no senil contra el reggaeton, aunque es decepcionante ver oleadas de masa encefálica prendidas a la contracultura del bling bling.
Sabina solo no puede contra todos, me temo.
Cualquier día me veo de fan de Judith Bustos, la Tigresa del Oriente.
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