Mientras el mundo observa con admiración nuestro vigoroso paso en el cumplimiento de nuevas metas dictadas por nuestro invencible Comandante en Jefe en los lineamientos del 1er Congreso del Partido, hay historias cotidianas se podría decírseles humanas de amor a la Patria, la Revolución y el Socialismo el único sistema en el cual el hombre recupera su dignidad de fervor revolucionario siempre alerta a los arteros ataques del Imperio Opresor que a escasas 90 millas de nuestra bella isla no se resigna a que los cubanos construyan una sociedad más justa y más bella traidores que no soportan nuestras incontables victorias en la arena nacional y hasta internacional con el apoyo del mundo entero y eso lo saben muy bien los señores imperialistas que tienen sumido a Haití en la más profunda pobreza desconsolada mientras ellos beben champán y gozan de placeres y lujosos yates a los que no les tenemos ningún miedo.
Ellos, perros y la gusanera y la Mafia que ha sido denunciada miles de veces en la arena nacional y hasta internacional saben muy bien que aquí hay un pueblo de paz, de amor y de grandeza justiciera por los pobres de la tierra.
Sí, somos un país pequeño geográficamente, pero los déspotas neoliberales no van a doblegar nuestras ansias y nuestros sueños y nuestras ansias y hasta nuestros sueños si fuera necesario.
Aquí, un botón de muestra de esos héroes y héroas del día a día, que un día se sientieron atados a la Revolución por el resto de sus días, y sus noches, sin importar el día de la semana, todos los días.
Cada día.
2 comentarios:
Jaaaaa!!!
¡Arriba Hortensia! (Lo que te den, cógelo, dicen...)
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